Los niños y niñas aprenden observando y
obteniendo la información de su entorno, así como las acciones de las personas
adultas. En lo personal, hace tres décadas fui madre de una bella niña (Angie) y
con ella me tocó ir aprendiendo a ser madre por ensayo y error. Además, a mi
hija también le tocó ir experimentando sus actividades de la misma manera. Tales
como gatear, caminar agarrada de los muebles, caminar soltándose poco a poco,
andar en bicicleta con una llanta o sin las dos ¡Qué triunfo!, andar en patines
y demás actividades que los niños y niñas van realizando. Fue aprendiendo a
realizar las famosas artes manuales, tales como: recortar, pegar, hacer velas,
elaborar repujado, dibujar y pintar y porque no también aprender a cocinar.
Mis amistades me preguntan cómo llegué a concebir
una hija e hijos exitosos y ahora una nietecita Katy, quien también va por el
mismo camino. Bueno, si pienso en eso de ensayo y error. Déjenme pensar que
algo hice bien y muy bien. En primer lugar, les permití ser libres, ser ellos
mismos y siendo honesta pienso que he sido muy flexible con mi hija y con mis
hijos. En segundo lugar, como madres/padres no podemos hacer las amistades por
ellos, pero podemos enseñarles habilidades sociales que se deben aprender desde
la niñez. Por ejemplo, a partir de los tres años las habilidades sociales como
el autoconocimiento, el autocontrol, la empatía y la motivación son vitales,
pues ayudan en el desenvolvimiento con sus compañeros/as en el maternal o con
sus vecinos/as, en el conocimiento de sí mismo y de los demás, en lograr
resolver un problema de tal forma que te sientas cómoda y poder entender que
todo ello lo realizarán por sí mismos. Es importante saber que los niños y
niñas son seres egocéntricos y esto es básico en su desarrollo, ya que deben
experimentar por si mismos cuál es su lugar que les corresponde vivir en la
sociedad.
No siempre queremos que nuestros hijos e hijas
conecten con los demás, ¿Por qué motivo se preguntarán? Y pensamos muy
sabiamente que no todas las relaciones y amistades son buenas para nuestros
hijos e hijas, lo cual es vital que sean capaces de reconocer y actuar ante esta
situación. El ser humano es capaz de crear buenas amistades, ya que es
importante mantener una vida saludable ¿De qué manera? ¿Cómo?
aprendiendo a marcar la diferencia y aprender a responder ante las exigencias
que se nos van manifestando en el día a día.
Como padre y/o madre debes poner el acento en la
enseñanza de habilidades sociales y puedas fomentar el hecho de conectar con el
mundo, tu hijo e hija irá experimentando seguridad y confianza en sí mismo.
En conclusión, la mayoría de seres
humanos se comportan según lo que aprendieron de pequeños.
Hola, soy Norma Melara Fundadora de Centro de Liderazgo ADEKÚATE & AVANZA. Mi pasión es luchar a favor de los Derechos Humanos de la niñez, la juventud y las mujeres.